sábado, 9 de mayo de 2015

B ~ REALIDAD "VIRTUOVISUAL".

Desde la incomodidad de este asiento ya ajado de "¿Y qué, ah?" quiero expresar mi desacuerdo con cierto suceso.
 

Está muy bien saber copiar milímetro a milímetro. Pero es injusto que, si se trata de un ejercicio de valoración de composición y color (esto es, la elección intuitiva/deductiva de estos elementos), se valore igual a quien ha elegido una imagen en la que ya venían propuestos por otro artista y a alguien que la ha pensado, repensado, manoseado hasta la hartura y plasmado hasta la, incluso, "cutrefixión".

Quiero decir, sin soberbia ni envidia, tengan en cuenta, que la técnica de copiar una imagen ya creada por otro me parece una labor acomodada en el preciosismo, mañosa, pero en el caso que nos incumbe, en el de una clase de aprendizaje de la composición y el color, debería tener una revisión más profunda, y una advertencia para reactivar el carácter imaginativo que a todos nos tiene amarrados en este itinerario.


A copiar se puede aprender, y, por suerte o desgracia, todos estamos desde el momento en el que nos defenestran del vientre expuestos a influencias. A moldear las influencias se nace queriendo saber.
Y eso lo sabemos todos.

M.R.C. Pseudo-ensayo educado y tolerante.


No hay comentarios:

Publicar un comentario